Una ballena gris del pacífico dió un espectáculo marino a unos sorprendidos turistas cuando les permitió acariciarla desde su barco.
La simpática ballena de casi 8 metros, sacó su enorme cabeza del agua y permitió que la acariciaran.
Los turistas asombrados, asistían a una escena en la que la ballena apareció al lado de su barco y parecía mendigarles muestras de afecto.
Un vídeo de 30 segundos de un pasajero, muestra como el mamífero se encontraba a pocos centímetros del barco.
En esta época, estas ballenas migran desde las aguas de Alaska, donde se alimentan, a aguas más cálidas. Los adultos utilizan las aguas más calientes para aparearse y alumbrar a sus vástagos.