Kathryn Nevatt contuvo la respiración durante siete minutos y 45 segundos, mientras flotaba boca abajo en la piscina Porirua, estableciendo el récord nacional y quedando cuarta en el ranking mundial femenino para la apnea estática.
El récord se estableció durante los campeonatos nacionales de apnea neozelandeses, celebrados en las piscinas de Porirua y naenae en Wellington.
La apnea es un deporte de contención de la respiración en el agua, es el buceo llevado al extremo.
En las competiciones en piscina, los competidores realizan inmersiones en base a la distancia buceada (dinámica) y tiempo de apnea (estática).
Las competiciones de profundidad se llevan a cabo durante el verano en aguas abiertas donde los buzos llegan a grandes profundidades aguantando la respiración.
El cuerpo experimenta una respuesta cuando se sumerge que permite a los buzos conservar de forma natural el oxígeno gracias a la bajada de la frecuencia cardíaca, y otros factores que les permiten contener la respiración durante largos períodos de tiempo y permanecer consciente.
La apnea puede ser peligrosa si se practica sólo o sin los conocimientos adecuados, debido al riesgo de perder el conocimiento, un curso o sesión de iniciación es altamente recomendable.
La mayoría de los principiantes se sorprenden y consiguen contener la respiración entre dos y cuatro minutos en su primera sesión