Un buzo español sobrevivió más de dos días en una bolsa de aire subterránea, prácticamente sin oxígeno, antes de ser rescatado.
El tanque de aire del Sr. Xisco Gracia no funcionó correctamente en una cueva en Mallorca el sábado 15 de abril.
Su compañero de buceo, Guillem Mascaró, lo dejó en busca de ayuda.
El experto espeleólogo y geógrafo se sentó en la oscuridad, a unos 40 metros de profundidad, durante las 60 horas que tardaron los equipos de rescate en llegar hasta él. Tenía una pequeña piscina de agua dulce de la que bebía, pero se desanimó después de muchas horas.
Primeras imagenes de Xisco.Gràcia saliendo de Cova de Sa Piqueta #Manacor pic.twitter.com/4rBjSyW06i
— 112 Illes Balears (@112IllesBalears) 17 de abril de 2017
«Perdí la noción del tiempo, pensé que había sido cinco días, demasiado tiempo, así que pensé que mi amigo no podía salir ó no podía encontrarme», dijo Gracia.
Dijo que tenía alucinaciones.
«Después de tanto tiempo respirando un aire tan cargado de dióxido de carbono, a veces veía algunas cosas, como luces o burbujas, y pensé que alguién había venido a rescatarme, pero cuando no llegaron me desanimé», dijo .
Los esfuerzos de rescate se vieron obstaculizados por la escasa visibilidad del agua.
Los equipos de rescate habían intentado perforar un agujero a través de las rocas para pasarle comida y agua, pero el intento fracasó.
El señor García y su colega estaban examinando la topografía de la cueva cuando ocurrió el incidente.
«Podrían haber intentado estirar el aire de un buzo, pero seguramente habría sido suicidio y ambos habrían muerto».
El Sr. Gracia, un buceador experimentado y experto en cuevas, según medios locales, fue rescatado alrededor de la medianoche del lunes.
La cavidad en la que se encontraba estaba a casi 3.000 metros de la entrada de la cueva, conocida como Cova de sa Piqueta en Manacor.
Ha pasado la noche en el hospital, pero no tiene lesiones.